El ex vicepresidente Amado Boudou se encuentra estable este sábado luego de la descompensación que sufrió anoche cuando ofrecía una charla en la Universidad Nacional del Comahue, en Neuquén, y por la cual debió ser internado. Por estas horas, personal de salud del Hospital Regional dispone todo lo necesario para su traslado a la ciudad Buenos Aires en un avión sanitario, según confirmó el director de la institución, Adrián Lammel, quien indicó que el exfuncionario será llevado al Hospital Italiano.

“El amigo y compañero Amado Boudou está recuperándose bien luego de una descompensación que tuvo mientras daba una charla en Neuquén. ¡Sólo un susto! Le mandamos la fuerza y el cariño de la militancia que recibimos en tránsito a nuestro querido Amado”, publicó en su cuenta de Twitter la organización Soberanxs, el espacio político al que pertenece el dirigente.

El amigo y compañero Amado Boudou está recuperándose bien luego de una descompensación que tuvo mientras daba una charla en Neuquen. Sólo un susto!! Le mandamos la fuerza y el cariño de la militancia que recibimos en tránsito a nuestro querido Amado. pic.twitter.com/HvyltFitnu

— Soberanxs (@soberanxs) May 13, 2023

Según el diario La mañana de Neuquén, su familia había requerido su traslado al Hospital Italiano de Buenos Aires, el cual finalmente se concretaría esta tarde.

“Sufrió un accidente isquémico transitorio (AIT) que se pudo revertir cuando lo estaban atendiendo”, indicaron al medio citado fuentes cercanas a su círculo íntimo, aunque la información no fue confirmada de manera oficial.

“Está bien, estable. Pasó bien la noche. La familia es la que va a hacer comentarios”, había declarado más temprano el director del Hospital Regional Neuquén.

Descompensación e internación

El exfuncionario kirchnerista sufrió anoche una descompensación cuando ofrecía una charla en la Universidad Nacional del Comahue y tuvo que ser trasladado al hospital Castro Rendón, donde se encontraba estable, según consignaron fuentes allegadas al también exministro de Economía.

Boudou debió interrumpir su disertación cuando empezó a sentirse mal y fue llevado al centro asistencial, de acuerdo con voceros policiales, a donde ingresó por sus propios medios. Según la institución, el ex vicepresidente se dio cuenta de que algo estaba mal porque comenzó a hablar con dificultad. Sin embargo, se indicó que nunca llegó a dejar de entender lo que estaba pasando.

Fuentes de su entorno consignaron que una vez en el hospital le realizaron una tomografía, entre otros estudios. Asimismo, señalaron que estaba previsto que hoy viajaran a Neuquén su esposa Mónica García de la Fuente, madre de sus dos hijos, publicó la agencia de noticias Télam.

Qué es el AIT

De acuerdo con un artículo publicado por LA NACION, el AIT al que apuntan fuentes allegadas a Boudou consiste en una alteración transitoria de la circulación sanguínea cerebral y significa “accidente isquémico transitorio”. Se trata de un cuadro neurológico en el cual se interrumpe el flujo sanguíneo en alguna arteria cerebral produciendo síntomas similares al ACV o accidente cerebrovascular.

De hecho produce los mismos síntomas que el accidente cerebrovascular -dificultad para hablar, debilidad en los brazos y/o asimetría en la sonrisa- pero en este caso el flujo sanguíneo se restituye espontáneamente. Por definición este cuadro clínico dura algunos minutos, lo más frecuente puede ser hasta una o dos horas de sintomatología e incluso hasta 24 horas. Pero la realidad es que lo corriente es que dure muy pocos minutos.

Los motivos por los cuales se produce una obstrucción transitoria en una arteria cerebral pueden ser varios, entre ellos la formación de un coágulo que tape esa arteria y que espontáneamente se deshaga o desaparezca volviendo a circular libremente la sangre. También podría ser el caso de algún pequeño coágulo que se forme en cualquier parte del cuerpo y pueda viajar a través de las arterias, llegar hasta una arteria cerebral y taparla, fenómeno denominado embolia. Después espontáneamente se restituye el flujo sanguíneo. Sin embargo, aunque no existieran coágulos algunas veces las arterias sufren una suerte de espasmo transitorio, achicando su calibre con lo cual comprometen la circulación normal de la sangre.

Entre los factores que condicionan la aparición de un accidente isquémico se destacan: la hipertensión arterial, la diabetes, la fibrilación auricular (que es una arritmia cardíaca frecuente), antecedentes familiares de accidente cerebrovascular, colesterol elevado, tabaquismo, exceso de consumo de alcohol y el uso de drogas recreativas.