Arqueólogos del Kinneret College y el Centro para el Estudio del Judaísmo Antiguo y los Orígenes Cristianos (Csajco por sus siglas en inglés), aseguran haber descubierto en el norte de Israel un templo que podría ser la iglesia de los Apóstoles. 

El hallazgo fue hecho en las ruinas del antiguo pueblo de Betsaida, a orillas del lago Beit Habek, cerca de la costa norte del mar de Galilea. Según un comunicado del Csajco, la llamada Iglesia de los Apóstoles fue construida sobre las casas de los apóstoles Pedro y Andrés, que formaron parte de los primeros discípulos de Jesús. 

En el Nuevo Testamento, dice el texto, también existen registros de la existencia de esta iglesia.  Tras cuatro años de excavaciones los investigadores solo han podido desenterrar habitaciones del lado sur de la iglesia, que pertenecía a un complejo de monasterios. El templo "tenía pisos de mosaico ornamentado, algunos de los cuales están bien conservados", explica el comunicado. 

Además, los arqueólogos encontraron "un fragmento de la pantalla de mármol del presbiterio, decorado con una corona de flores, así como teselas de vidrio doradas en oro que pertenecían a un mosaico de pared. Estos elementos decorativos dan testimonio de una iglesia grande y magnífica". 

Con este descubrimiento además se refuerza "la posible identificación de la aldea de Betsaida en el sitio de el-Araj". Pues en este 2019, los investigadores demostraron que la antigua aldea judía que fue fundada nuevamente por Herodes Felipe y rebautizada como Julias se extendió por un área más grande de la imaginada hasta entonces.

Los investigadores, que bajo la erosión del río Jordán, buscarán seguir desenterrando más tesoros de la antigüedad.