Un poco más de un cuarto de hora duró la primera conferencia de prensa de Ramón Díaz como nuevo director técnico de Vasco Da Gama. “Es un entrenador de referencia, con experiencia, que ya pasó por desafíos como éste. Es la persona indicada para nuestro momento. Estamos felices y esperanzados por tenerlo”. Así fue presentado el DT en el equipo carioca, que está penúltimo en el Brasileirao, con igual cantidad de puntos que el último, América de Minas Gerais. Ocho derrotas y una victoria es el balance de las últimas nueve fechas. Los cuatro equipos que cierren las posiciones perderán la categoría. Vasco está cuatro puntos por debajo del primer conjunto que se mantiene en la división.

Durante su exposición, el Pelado, que cumplirá 64 años el 29 de agosto, hizo varias invocaciones a la necesidad de “trabajar duro para salir de esta situación”. El riojano fue contratado para atender y resolver una urgencia: Vasco Da Gama se encuentra en puesto de descenso en 14 fechas del Brasileirao (penúltimo, con igual cantidad de puntos que el último, América de Minas Gerais). Ocho derrotas y apenas una victoria es el balance de las últimas nueve fechas. Los cuatro equipos que cierren las posiciones perderán la categoría. Vasco está cuatro puntos por debajo del primer conjunto que se mantiene en la división.

Ramón firmó contrato hasta fines de 2024 y debutará el próximo domingo, ante Athlético Paranaense, de local en el estadio Sao Januario, pero sin público, una ausencia que el DT lamentó. Vuelve a la actividad después de una dura circunstancia familiar, como lo fue el grave accidente de tránsito en una ruta que a mediados de marzo protagonizó su hijo Michael, en el que murieron su nuera y otra persona. Por esa razón se desvinculó de Al Hilal (Arabia Saudita) y viajó a la Argentina para acompañar a su hijo menor, mientras el mayor, Emiliano, su ayudante de campo en Medio Oriente, se hizo cargo del equipo hasta que terminó la liga, a fines de mayo.

Ahora acepta un desafío que lo motiva: “Le agradezco al club por esta oportunidad. Estoy muy feliz de estar acá. Siempre quise venir a Brasil porque es un fútbol de alta competencia, que es lo que me gusta”. Para él, es una revancha tras un fugaz paso de tres partidos con derrotas en 2020 en Botafogo, de donde se alejó por una intervención quirúrgica en la garganta.

Ya condujo tres prácticas durante la semana pasada. “Es un equipo joven, con algunos jugadores de experiencia. Necesitamos mucho trabajo, dedicación y coraje. También hacen falta refuerzos. Nos comprometimos a armar un equipo competitivo”, declaró Ramón, que intentó comprometer al dirigente que tenía a su lado.

Hasta ahora hubo tres incorporaciones. La más importante, el chileno Gary Medel, que llega con el pase en su poder desde Bologna. Pitbull, de 35 años, le puso fin a una carrera de 13 temporadas en Europa, desde que Boca lo transfirió a Sevilla, con posteriores pasos por Cardiff City, Inter, Besiktas y Bologna. Los otros dos son Maicon (defensor, de 34 años) y Serginho, un volante que regresa del fútbol turco.

Un periodista le comentó a Ramón sobre la carencia de un enganche en Vasco Da Gama, de un volante creativo. Y lo consultó sobre la posibilidad de Manuel Lanzini, un nombre que iluminó la mirada del riojano: “Lanzini es uno de los jugadores importantes, lo conozco hace mucho tiempo. Estamos trabajando muy duro para poder concretar esas negociaciones.”

Lanzini, de 30 años, es jugador libre, tras desvincularse de West Ham. El Pelado lo dirigió en River, fue una de las figuras en la obtención del título local en el primer semestre de 2014, antes de la llegada de Marcelo Gallardo. Luego fue transferido a Al Jazira, de los Emiratos Árabes Unidos. Lanzini es conocido en el fútbol brasileño, ya que entre 2011 y 2012 estuvo en Fluminense.

La pretensión de Ramón choca con el interés de River, que ya le trasladó a Hernán Berman, representante de Lanzini, una propuesta para que vuelva a ponerse la camiseta con la banda roja. River espera respuesta a su oferta de un contrato por dos años, con la posibilidad de extenderlo por uno más, por un monto cercano a los cinco millones de dólares, según trascendió extraoficialmente. Esa cifra cubriría la prima por su pase y el contrato.

Mientras tanto, Lanzini, de vacaciones, se toma un tiempo para decidir, especula con un mercado europeo que estará abierto hasta el 30 de agosto. De España podría ser tentado. En River admiten que es “una operación difícil, un sueño”, pero que cada día que pasa sin que firme por un club europeo, o de Medio Oriente, juega a favor de una vuelta a la Argentina.

Por las dudas que naufraguen las gestiones por Lanzini, Ramón también le apuntó a otro ex-River: el colombiano Jorge Carrascal, interesado en salir de CSKA de Moscú porque los equipos rusos están excluidos de las copas europeas. En el caso de Carrascal, Vasco Da Gama tiene competencia en PAOK Salónica, que presentó una oferta de 4,5 millones de euros. Y un tercer ex-River, Rafael Santos Borré, fue sondeado sin éxito por el club carioca; no hubo acuerdo con Eintracht Frankfurt.

Ramón expuso su plan para salir del fondo de la tabla: “Queremos un equipo intenso, con mucho orden táctico. Tenemos una responsabilidad muy importante. El jugador debe entender que se necesita mucha dedicación y disciplina. He estado en muchos países, y cada nuevo país es un desafío diferente. Va a ser un año muy importante para nosotros. Y también ha que pensar en grande, no solo en este complicado presente, sino también en el futuro”.