Acogedora, simple y perfecta: así es la cabaña de Alicante donde Carlos Alcaraz vive y que sorprende por un motivo
Carlos Alcaraz podría tener fácilmente todo lo...
Carlos Alcaraz podría tener fácilmente todo lo que desea. Pero al mejor del mundo en tenis parece alcanzarle con 90 metros cuadrados. O eso es lo que parece. El joven español, que recientemente ganó su primer título en Wimbledon al derrotar al número dos del Ranking ATP, Novak Djokovic, vive en una modesta cabaña en Alicante que forma parte del centro donde entrena a diario para coronarse en lo más alto del deporte.
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El nombre de este deportista, originario de Murcia, hoy resuena en todo el planeta y se reafirma como el número uno del tenis con tan solo 20 años. La victoria contra Djokovic no fue un tema menor para él, ya que creció viendo los partidos del serbio cuando apenas era un niño, sin imaginarse que años después no solo se cruzaría con él en la cancha, sino que resultaría vencedor.
En 2019, Alcaraz abandonó El Palmar, en Murcia, para centrarse en su futuro deportivo. A poco más de 120 kilómetros se situaba la Academia Equelite de Juan Carlos Ferrero, fundada por el extenista que lleva su nombre y actual entrenador del español.
Se trata de un centro de alto rendimiento en la localidad alicantina de Villena, donde los deportistas no solo se preparan en la disciplina, sino que pueden hacer vida allí dentro, tal como le sucedió al joven atleta. En la página web de la academia se promociona un hotel rural, donde las personas pueden hospedarse para relajarse, disfrutar de días de spa y practicar una gran variedad de deportes: tenis, pádel, básquet, bicicleta, running o fútbol a cualquier nivel. También se ofrece un paquete de entrenamiento personalizado durante el verano en el hemisferio norte.
En una de esas casas prefabricadas de estilo rústico, donde se pueden hospedar también los familiares que van de visita, vive Alcaraz. Cuando llegó, hace cuatro años, el tenista hizo vida en una de apenas 25 metros cuadrados. De hecho, allí pasó la cuarentena durante la pandemia por Covid-19 en 2020. Muchas cosas se detuvieron, pero no sus ganas de convertirse en ganador.
Más adelante, Carlos se mudó a una vivienda más grande dentro del recinto, de 90 metros cuadrados y que fue el hogar del propio Juan Carlos Ferrero cuando se convirtió en número uno del mundo en 2003. Con evidente disciplina y esfuerzo, el día del joven veinteañero transcurre en la cancha de tenis, en el gimnasio y luego en la pequeña cabaña.
En el sitio web de la academia se puede observar cómo es el interior de las cabañas, que están completamente amobladas y cuentan con todos lo necesario para instalarse y comenzar a descansar o entrenar, según sea el caso.
Asimismo, el centro de alto rendimiento también tiene 20 pistas de tenis, una gran pileta, gimnasio, servicios de fisioterapia y psicología deportiva, restaurante e incluso un colegio.
La academia, que tiene un terreno de 120 mil metros cuadrados, está rodeada de jardines para pasear, alejados del ruido de la ciudad, un ambiente perfecto para el entrenamiento de deportistas de alto rendimiento como Alcaraz.
