Es común, en las calles y negocios de Tilcara (Jujuy), escuchar tonadas porteñas o cordobesas. Pero ¿cómo es que esta ciudad extremadamente al norte de nuestro país, y a casi 24 horas de viaje en auto desde la ciudad de Buenos Aires, enamora tanto a los turistas que muchos de ellos se quedan a vivir allí?

Las respuestas son varias, pero la principal es que este remanso en el norte les ofrece una posibilidad de hacer su vida a la medida de sus deseos. Tilcara, fundamentalmente, combina la belleza y la tranquilidad de sus montañas áridas de muchos colores con una actividad turística importante, lo que resulta una buena opción para arrancar con un emprendimiento para quienes llegan y deciden quedarse a vivir.

Para centenares de mochileros que hacen la famosa ruta del norte, Tilcara es parada obligada. Por lo general se quedan varios días, ya que su ubicación les permite hacer base y moverse por los distintos puntos turísticos de la Quebrada de Humahuaca. Esto hace que, a comparación de otras ciudades turísticas de Jujuy, Tilcara se distinga por su gran cantidad de visitantes, que ven también allí una mayor oferta turística con hostels, bares, pubs y mucha movida juvenil.

Irse a vivir: toda una decisión

Aunque sea lindo visitarla, no es lo mismo decidir trasladarse y quedarse aquí. Más para quienes están acostumbrados a las grandes ciudades. El cambio puede ser brusco y tomar un tiempo para adaptarse. La vida depende esencialmente de la actividad turística, con épocas más intensas –con su pico en Carnaval– y otras más tranquilas. Sin embargo, Tilcara sigue enamorando a visitantes que pasan y dicen: “Qué lindo vivir aquí”.Y se mudan. Lo que primero parece un anhelo, con el tiempo, pasa a materializarse. La tranquilidad y la conexión con la naturaleza son algo asegurado.