Basada en personajes reales: la miniserie de Netflix de 6 capítulos que los fanáticos del fútbol no se pueden perder
Desde la temporada cuatro de Yo nunca a la sexta entrega de Black Mirror. El ...
Desde la temporada cuatro de Yo nunca a la sexta entrega de Black Mirror. El Top 10 del ranking mundial de Netflix varía continuamente, a raíz de los estrenos que lanza el gigante de streaming y las series que causan furor entre los suscriptores, pasando por el suspenso y el terror hasta el género más romántico y de relatos adolescentes. Entre sus producciones, se encontró una de 2020 que los fanáticos del fútbol no se pueden perder, ya que se basa en figuras reales del siglo XIX: de qué se trata.
Un juego de caballeros (The English Game) se estrenó en 2020 y constó de 6 episodios de 45 minutos cada uno. Dos futbolistas del siglo XIX, que ocupan los lados opuestos de una división de clases, se enfrentan a un objetivo que cambiará el juego de este deporte en Reino Unido para siempre y dará paso a los orígenes del fútbol moderno. Bajo la creación de Julian Felowes (creador también de Downton Abbey), Kevin Guthrie y Edward Holcroft dieron vida a Fergus Suter y Arthur Kinnaird en la ficción de Netflix.
Un juego de caballeros se estrenó en 2020 y forma parte del catálogo de NetflixLa pasión por el deporte, los lazos románticos y amistosos y la lucha de clases se plasmaron en esta miniserie, que retrató el origen del fútbol moderno en la Inglaterra del siglo XIX. Así, se evidenciaron también las problemáticas personales, cuando Suter debió hacerse cargo económicamente de su madre y sus hermanas, para huir de la violencia que sufrían en su casa por parte de su padre.
Los personajes reales de la ficciónEn la realidad, Fergus Suter, de origen escocés, fue considerado el primer jugador profesional del fútbol inglés. El trabajador, que nació en Glasgow en 1857, se desempeñaba como albañil antes de mudarse a Inglaterra para jugar en Darwen y Blackburn Rovers. En cambio, en la ficción, el jugador se desarrollará en Blackburn Olympics por una cantidad de poco más de 100 dólares, un monto que en aquel momento no estaba permitido cobrar.
Suter jugó la final de la Football Association Cup (FA Cup) en 1882, en el conjunto Rovers, pero no logró la victoria. Sí lo consiguió el Olympics un año después, frente a Old Etonians, donde el jugador no participó, aunque en la ficción, Fergus marca dos goles que lo consagran ganador del partido.
Por su parte, Arthur Kinnaird, nacido en Londres en 1847, fue dirigente de la FA desde 1869, como tesorero y como presidente. Su primer trabajo fue como banquero y, posteriormente, se consagró una de las primeras estrellas del fútbol al ganar cinco FA Cup, tres con Wanderers F.C. y dos con Old Etonians (conformado por exalumnos de Eton College). Más adelante, se convertiría en presidente de la Asociación Inglesa de Fútbol, cargo que ocupó por más de tres décadas.
Como presidente de la FA, pasó a formar parte de la FIFA en 1905 y comenzó a construir el estadio de Wembley, que se inauguró el 28 de abril de 1923. Para aquel entonces, Kinnaird había fallecido, tres meses antes, el 30 de enero.