Encontraron otra vez armas en la casa del chico detenido por las amenazas de bomba
La Justicia de Menores de San Isidro det...
La Justicia de Menores de San Isidro detuvo ayer al chico de 16 años que, en marzo pasado, había sido señalado como responsable de una serie de amenazas de bomba en el Riverside School, en Acassuso. Esta vez, lo aprehendieron por vincularlo con la intimidación –mediante un mail en el que decía haber colocado explosivos– contra, al menos, once colegios privados de la zona norte del Gran Buenos Aires, de la Capital Federal y también de Quilmes y Lomas de Zamora. La sorpresa de las autoridades fue que en el allanamiento que se hizo en su casa encontraron otra vez armas de fuego y municiones en la mesa de luz del menor.
“Se evitó una catástrofe. Es contrafáctico, pero es así”, dijo uno de los investigadores del caso a LA NACION.
En la tarde de ayer, la policía bonaerense ingresó al chalet ubicado en Martínez, partido de San Isidro, donde el adolescente vive con sus padres y un hermano. La escena, según se ve en imágenes sacadas por la Policía bonaerense, fue como haber ingresado a la vivienda de una banda de delincuentes o personas que estaban listas para cometer un ataque.
Adentro se encontró una CPU, una notebook, cuatro teléfonos celulares, cinco tablets, dos navajas rebatibles, una navaja tipo daga, un cuchillo de caza, una escopeta cal .410, dos rifles de aire comprimido, tres municiones cal .410 marca Brennek, dos municiones FAL 765, dos municiones cal 38 LR, una munición cal. 9mm, 13 municiones cal. .22, varias vainas servidas de diversos calibres, cuatro routers y dispositivos de almacenamiento digital.
Además, de las municiones que se encontraban en la mesa de luz del menor detenido, secuestraron un arco de tiro, similar al del protagonista del libro Tenemos que hablar con Kevin.
De la investigación participan Gastón Garbus, jefe de la Unidad Funcional de Instrucción Descentralizada de Martínez, en el departamento judicial de San Isidro, y la Unidad Fiscal Especializada en Investigaciones de Ciberdelitos (Ufeic) de San Isidro, que encabeza el fiscal Alejandro Musso.
Fuentes ligadas a la investigación señalan que quien mandó anteayer el mail intimidatorio usó una plataforma de mail encriptado radicada en Estados Unidos, y la Justicia de ese país ya realizó una petición para poder acceder a la información que los llevará directamente al que envió las amenazas.
¿Por qué se sospecha del mismo menor?La persona que envió anteayer el mail a, al menos, once colegios, usó como usuario el alias “Córdoba”. Las autoridades judiciales comenzaron a investigar y el joven detenido usaba ese mismo usuario en un videojuego de acción llamado Grand Theft Auto (GTA). Además, señalan que encontraron muchas coincidencias entre las amenazas enviadas en marzo y las que recibieron los colegios esta semana. En base a ese “match” de información, decidieron ir tras él.
“Este es solo el principio de un problema porque la Justicia de Menores no tiene tantas herramientas. Para internarlo, debe estar de acuerdo el adulto y el menor. La vez pasada, el padre, que es un conocido psiquiatra, externó a su hijo. Salvo que actúe la Justicia Civil y tome una medida cautelar y lo interne, cosa que no suele suceder, el chico va a volver a su casa”, indicaron fuentes ligadas a la investigación.
El menor de edad, luego de las amenazas enviadas en marzo al Riverside School, continuó como alumno de esa institución porque las autoridades educativas no podían echarlo sin que antes tuviera una nueva vacante en otra escuela, lo que generó un escándalo entre los padres de los otros alumnos del colegio. Ahora, el menor cursa sus estudios en otra institución, aunque las autoridades no precisaron el nombre del colegio.
En marzo pasado, la policía había allanado esa misma vivienda y ya habían encontrado varias armas registradas legalmente a nombre del padre de familia, entre ellas un rifle Grant M1, una carabina 22, un fusil táctico 22, entre otras. “Estas armas entraron a la casa después de los allanamientos de marzo”, precisó un investigador.
Durante el primer allanamiento, las armas fueron secuestradas preventivamente por la ANMaC –se consideró que era peligroso que estuvieran un guarda en un domicilio donde reside un acusado por una grave intimidación pública– y también se incautaron los celulares y la notebook que usaba el chico, donde se encontraron evidencias de que había sido el autor de las amenazas y búsquedas que revelaban que había “investigado” a quien lo investigaba.
Intimidación masivaEl hecho por el que el menor fue detenido ocurrió anteayer. Al menos once colegios privados, la mayoría de la zona norte de la provincia de Buenos Aires, entre ellos el Goethe Schule, San Andrés, Florence Nightingale, St. John’s, Colegio Riverside School y Northlands, recibieron un correo electrónico con una amenaza de bomba. Según fuentes judiciales, a las instituciones les llegó el mensaje a través de un usuario del tipo proton mail, que es un sistema de correo electrónico cifrado. Los colegios fueron evacuados y, en cada caso, las autoridades municipales y policiales activaron los protocolos correspondientes.
Según pudo saber LA NACION, el mismo mensaje intimidatorio también le había llegado al Devoto School, a la Escuela Cristóforo Colombo, al Nightingale Institute, el St. Matthew’s College sede fundadora y el Saint Catherine’s, de la ciudad de Buenos Aires, y en el St. George’s College, de Quilmes, el Sagrado Corazón, en Lomas de Zamora.
El mensaje que recibieron las escuelas anteayer a la mañana fue el siguiente: “Siempre hemos esperado este día. La podredumbre viene literalmente de todas partes. Cada año hay muchos ataques a escuelas en todo el mundo, una respuesta a una sociedad podrida. Creado desde el nacimiento del hombre, la esencia misma del mal. La escuela hace esclavos perfectos. Intentaste hacernos tan insignificantes como tú. Siempre pensamos en el día en que decidimos salir de la sombras”.
Y continúa: “Tras conocer el tiroteo en Belgrado, valiente guerrero de 13 años, el odio ya no se puede contener. Todo lo que sentirás antes de morir son fragmentos que perforan tu cuerpo. El olor de las balas de plomo que te dispararon. El sonido de un disparo será una larga vida para ti. Te quemaremos en queroseno. Ahogados en sangre. Somos el comienzo de tu doloroso final”.
Ese mismo mensaje intimidatorio que llegó a los colegios argentinos, lo había recibido, pero en hindi, la Escuela Internacional Ebenezer, de Anekal, en las afueras de Bangalore.
Todavía no se determinó el origen de ese mensaje. Los investigadores sospechan que podría haber circulado en algún blog o foro frecuentado por hackers o por jóvenes que siguen con atención las matanzas escolares y que pergeñan diatribas contra las instituciones formales. Tampoco se descarta que el texto haya sido escrito con una app de inteligencia artificial tipo Chat GTP-3.