La increíble teoría de una forense sobre la muerte de Tutankamón: “Era un adolescente típico”
Dentro de la historia de la humanidad, la muerte de ...
Dentro de la historia de la humanidad, la muerte de Tutankamón es uno de los puntos más misteriosos y fascinantes que, hasta el día de hoy, desvelan a los arqueólogos. Ahora, una investigación reveló el posible motivo por el cual el faraón encontró su final hace miles de años.
La encargada de elaborar esta teoría fue Sofia Aziz, egiptóloga, biomédica y forense, que sostiene que Tutankamón murió después de un accidente de carro de alta velocidad mientras estaba alcoholizado. Este siniestro, según su investigación, le ocasionó “fracturas en sus piernas” que, luego, se infectaron y lo llevaron a la muerte. En 2010, un grupo de expertos examinaron con rayos-X el cuerpo y así calcularon que tendría unos 19 años al momento de su fallecimiento.
“Era como un adolescente típico, bebía y probablemente conducía el carro demasiado rápido”, reveló Aziz a BBC Science Focus. Cabe aclarar que, de momento, los investigadores creían que el monarca “necesitaba un bastón para caminar”, debido a que tenía la enfermedad de Köhler, además de oligodactilia en el pie derecho y pie zambo en el izquierdo. Sin embargo, la egiptóloga fue tajante y consideró que los objetos encontrados en su tumba contradicen estos problemas de salud. En su descanso había: seis carros, una armadura y un alijo de vino. Cabe aclarar que ya se habían descubierto semillas y frutas, elementos que indicaban que estaba recibiendo tratamiento médico antes de su repentina muerte. “Estas posesiones indican que no estaba discapacitado y montaba carros como un rey guerrero”, señaló.
Aziz se detuvo, así, en la salud de Tutankamón y cómo encaró la investigación que hizo. “Cuando lo estudié no veía ninguna evidencia de que fuera discapacitado; ya había visto momias donde parece que hay un pie zambo”, dijo al Festival de Ciencias de Cheltenham. “Sus piernas estaban muy bien alineadas: si tuviera una deformidad, y si tuviera un pie zambo, habría tenido dificultades para caminar, pero los huesos largos simplemente no muestran ninguna evidencia de eso”, señaló.
La tumba de Tutankamón fue descubierta en noviembre de 1922 por un equipo de excavadores egipcios dirigido por el arqueólogo británico Howard Carter. El relato publicado de Carter ha captado, desde siempre, la comprensión del público sobre este hallazgo histórico. Su publicación de tres volúmenes La Tumba de Tut-Ankh-Amen es responsable de inmortalizar su supuesta respuesta a la pregunta de su mecenas, Lord Carnarvon: “¿Puedes ver algo?”. A lo que él respondió: “Sí, cosas maravillosas”. También hizo famosa la imagen de “por todas partes el brillo del oro” cuando miró por primera vez dentro de la tumba.
Hubo mucho interés en el descubrimiento en ese momento, lo que llevó a una amplia cobertura periodística. Una historia que resurgió constantemente, y sigue siendo popular, se refiere a la maldición de una momia que asoló a los involucrados en las excavaciones, aunque la idea de que los presentes en la apertura de la tumba encontraron finales prematuros fue completamente desacreditada.
Encontraron una momia preincaica de más de 1000 años de antigüedad con partes de piel y cabellos
Hay otras historias y leyendas sobre el descubrimiento, las excavaciones posteriores y sus legados, que contribuyen a una comprensión más completa del impacto profundo de este evento. Una de esas consecuencias culturales poco conocidas fue cómo el faraón comenzó a aparecer regularmente en los círculos espiritistas después del descubrimiento de su tumba.