Hay que viajar a octubre de 2014. Si se analizaban los nombres que utilizó Marcelo Gallardo para las tres competencias que disputó en la primera parte del ciclo, sorprendía encontrarse con que Ramiro Funes Mori era el hombre que más minutos disponía. Con Ramón Díaz tenía poco lugar.

El Mellizo, aquel héroe inesperado en la cancha de Boca, tomó un protagonismo estelar de la mano del Muñeco. Visto de reojo por herencia de su hermano, Rogelio, que no explotó su mejor versión, ni en el ascenso ni en primera, ese cabezazo agónico en la Bombonera lo hizo saltar a la fama. Luego del exitoso campeonato de la mano de Ramón, pasado el Mundial de Brasil y con Eder Álvarez Balanta lesionado, el Mellizo se hizo dueño del fondo de River.

“Su llegada generó confianza en todos, por eso tuvimos un plantel tan fuerte. El Muñeco nos habló mucho. En mi caso, siento que lo que aprendí con Gallardo me trajo a la selección”, contó el zaguero, tiempo después. Fue uno de los más queridos y aplaudidos. Alteraba a muchos hinchas cuando salía jugando, eso es cierto, pero se convirtió en una pieza clave.

En ese momento (durante el primer semestre del Muñeco) Ramiro Funes Mori jugó 1613 minutos de los 1800 que disputó River con Gallardo. Funes Mori apenas estuvo ausente en dos partidos: Rosario Central (Copa Argentina) y Belgrano (fecha 12, al cumplir la suspensión por su expulsión con Boca). En ese tiempo, el Mellizo marcó un gol, que a River le valieron tres puntos de oro: el 1-0 contra Newell´s, en Rosario.

Otros tiempos: lo seguían en ese rubro Carlos Sánchez y Marcelo Barovero, otros jugadores que dejaron un recuerdo imborrable, también en choques contra Boca. Ahora, Ramiro Funes Mori, a los 32 años, vuelve a River. El caudillo, sin embargo, más allá de los problemas defensivos que suele ofrecer el campeón de la Liga Profesional, no tiene el puesto asegurado. Leandro González Pírez es una revelación y Paulo Díaz recuperó su nivel. Detrás, siguen Rojas y Mammana, con diversas molestias físicas. Ramiro lo sabe: no tiene el puesto asegurado. Y eso será un enorme desafío para el central y, también, para el entrenador.

Funes Mori (Everton, de la Premier League, Villarreal, Arabia Saudita y Cruz Azul) se sumó al plantel bajo el mando de Martín Demichelis y sólo resta que firme el contrato para que se oficialice como el primer refuerzo de cara al segundo semestre del 2023, que tendrá a la Copa Libertadores como principal objetivo, luego de la consagración a nivel local. El zaguero, que llegó desde Cruz Azul, se consagró con Ramón Díaz en el torneo local y fue indispensable en los trofeos siguientes, sobre todo, los internacionales, con el Muñeco. No sólo se lo recuerda por el gol en la Bombonera (“no fue córner”, resultó la frase de Carlos Bianchi, el DT de Boca), sino que también marcó en la definición contra Tigres, por la Copa Libertadores 2015. Un elocuente 3 a 0, bajo la lluvia, en el Monumental.

Fue una época, luego de la primera temporada, en la que River se hizo fuerte de atrás hacia adelante, con zagueros bravíos, con fuerte personalidad. Mercado, Vangioni, Pezzella y Maidana (sigue en River, cumplirá 38 el 29 de julio), entre otros, representan todo un símbolo de esa época. También, el Mellizo.

Martín Demichelis confirmó este lunes que la primera incorporación del equipo millonario es Ramiro. De todos modos, el entrenador, sin entrar en detalles del mercado de pases, explicó en la rueda de prensa que el primer gran “refuerzo” es otro. “Lo que hoy tenemos es David Martínez (recuperado de una lesión), él pidió jugar en Reserva y se pudo entrenar a la altura del grupo, estamos muy felices de poder contar con él. El próximo también va a ser Bruno Zuculini, quien está muy cerca de poder volver a trabajar a la par del resto, y está lo de Ramiro Funes Mori, que es real, pero está en manos del club”, agregó el DT millonario.

Al mismo tiempo, Facundo Colidio está a un paso. “Boca con nosotros tenía un acuerdo, pero Colidio decidió esperar. ¿Dónde va a jugar? Puede ser que en River, solo falta la firma”, dijo esta noche a ESPN Javier Zanetti, hombre fuerte de Inter, de Milán.

Al mismo tiempo, Demichelis eligió no hablar de las negociaciones abiertas que hay por el zaguero central uruguayo Sebastián Boselli o de la chance del regreso de Manuel Lanzini, que también es pretendido por Vasco da Gama, de Brasil.