El plan de la NASA para destruir un gran asteroide que se dirige hacia la Tierra
Según los científicos, el enorme asteroide Bennu tiene entre 1 y 2.700 posibilidades de estrellarse contra la Tierra en el siglo XXII
Según las estimaciones de los científicos, el enorme asteroide Bennu tiene entre 1 y 2.700 posibilidades de estrellarse contra la Tierra en algún momento del siglo XXII. Debido a su peligrosidad, la NASA ya ha puesto en marcha un plan para tratar de desviar el asteroide, si se acerca demasiado a nuestro planeta, algo de lo que, como vemos, no tenemos certeza por los cálculos. Es posible que cuando se revisen los cálculos en el futuro, ya no haya el más mínimo riesgo, pero más vale prevenir que lamentarse.
Lo que los científicos han propuesto es enviar una nave llamada HAMMER (Hypervelocity Asteroid Mitigation Mission for Emergency Response) y hacer que esta actúe como un ariete para desviar a Bennu o, en el caso de que fuese necesario, destruirlo en mil pedazos con una bomba nuclear. Las dos posibilidades están sobre la mesa.
Bennu golpearía con la fuerza de 1.200 megatones de energía cinética (alrededor de 80.000 bombas de Hiroshima) y la posible fecha de impacto calculada por los investigadores es el 25 de septiembre de 2135, una fecha no muy lejana, de ahí que los expertos expongan nuestras opciones de emergencia.
"La posibilidad de un impacto parece escasa ahora mismo, pero las consecuencias serían terribles", dice uno de los equipos de defensa planetaria nacional, Kirsten Howley del Laboratorio Nacional Lawrence Livermore (EE. UU.). "Este estudio tiene como objetivo ayudarnos a acortar la línea de tiempo de respuesta cuando vemos un peligro claro y presente para que podamos tener más opciones para desviarlo. El objetivo final es estar listo para proteger la vida en la Tierra".
El diseño de HAMMER
La nave HAMMER (por el momento solo un concepto) pesaría cerca de 8.000 kilogramos y tendría una altura de 9 metros. El asteroide Bennu, en comparación, tiene alrededor de 492 metros de ancho, y pesa alrededor de 79.000 millones de kilogramos, unas 1.660 veces más pesado que el famoso transatlántico Titanic.
HAMMER sería enviada hacia Bennu a bordo de un Delta IV Heavy, el segundo cohete de lanzamiento de mayor capacidad del mundo, detrás del SpaceX Falcon Heavy. El momento de poner en acción el plan es crucial, pues un lanzamiento demasiado temprano hará difícil predecir lo que hará el asteroide; y lanzamiento demasiado tarde, hará que la roca gigantesca se vuelva mucho más difícil de mover de su órbita.
La NASA aún no ha recibido autorización para construir la nave pero es probable que nunca lo reciba, ya que se trata de un proyecto increíblemente caro.
Como ya podemos imaginarnos existen muchas variables en este escenario, y aún más teniendo en cuenta que faltan más de 100 años para ello. Afortunadamente, Bennu pasa cerca de la Tierra cada seis años, por lo que podemos observar de cerca lo que está haciendo (gracias a la a misión OSIRIS-REx) y la ruta que está tomando e ir reuniendo más información al respecto.
Hasta ahora la NASA ha detectado más de 10.000 objetos cercanos a la Tierra, y se estima que alrededor de 2.500 tienen el mismo tamaño que Bennu. De ahí la importancia de la previsión y de tener un plan de actuación.
Si algo de ese tamaño nos golpease, los expertos predicen que no llegaría a aniquilar la humanidad como la conocemos. Un asteroide necesitaría tener al menos 1 kilómetro de ancho para causar un evento de extinción en masa, como pasó con los dinosaurios.
Por supuesto, una colisión de un objeto de cualquier tamaño considerable sería catastrófico para al menos parte del planeta, por lo que la vigilancia es clave.
Referencia: Options and uncertainties in planetary defense: Mission planning and vehicle design for flexible response. Brent W.Barbee, Megan Bruck Syal, David Dearborn, Galen Gisler, Kevin Greenaugh, et al. Acta Astronautica 2017. DOI: https://doi.org/10.1016/j.actaastro.2017.10.021