Una mujer de Hialeah, Florida, estaba en su casa cuando comenzó su trabajo de parto. Rompió bolsa y tenía minutos para llegar a algún lugar donde le dieran atención médica. Junto con su madre y su esposo, se subió al auto, pero para ese instante ya no había tiempo para ir al hospital. Fue entonces que el hombre decidió hacer una maniobra arriesgada y parar en una estación provisional de bomberos, en un parque de la ciudad: “Sabía que iba a ser la mejor decisión para ella”.

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En declaraciones para Telemundo 51, la feliz familia contó cómo la estación de bomberos número nueve de Hialeah se volvió una improvisada sala de parto a cielo abierto. Jackie Cerna, la madre, relató que su hijo, al llamaron James Saúl Cerna, llegó al mundo en dos o tres minutos, “mirando la luz y con los ojos abiertos”.

La mujer agregó que sabía que había roto bolsa, pero que no imaginaba que su bebé estaba tan ansioso por llegar al mundo. “Subimos al auto con la creencia de que había tiempo para ir al centro de partos, pero una vez ahí sentí el impulso de pujar y empecé a gritar y a decir que el bebé estaba por nacer ya mismo”. Ante las posibilidades limitadas, su esposo tuvo la idea de llamar al 911 e ir a la estación más cercana de los bomberos, contaron al medio Local 10.

Cuando arribaron al lugar, Luis Fuentes, teniente, bombero y paramédico del departamento, vio a José Cerna bajarse a toda velocidad del auto. “Decía: ‘Mi esposa parto, el bebé ya viene’. Rápidamente busqué el kit y llamé al capitán, junto con otro compañero. Ayudamos a que este bebé viniera al mundo”. Para ellos también fue significativo compartir una experiencia como esta. “Ser parte de traer una vida es algo especial”, agregó el paramédico Alex Castillo.

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El Departamento de Bomberos compartió las imágenes en su cuenta de Facebook el pasado 1° de julio. A su vez, el equipo agradeció poder tener las herramientas necesarias para hacer la diferencia, dado que los camiones, así como sus estaciones y ambulancias están equipadas con un kit básico para partos, con un dispositivo de succión para limpiar las flemas del bebé en la nariz e instrumentos para cortar el cordón umbilical. Asimismo, reciben entrenamiento para disminuir el riesgo de cualquier complicación.

Un total de cinco oficiales atendieron el parto, que ocurrió en el asiento delantero del pasajero. “Vinieron corriendo y yo sentía el impulso de pujar y estaba pasando. Un bombero lo atrapó, casi con las manos desnudas con mi esposo ayudándole”, reveló Jackie. Inmediatamente después, la madre y el bebé fueron trasladados al hospital

Con su hijo James ya en casa, la mujer siente un profundo agradecimiento por la rápida respuesta de los bomberos. “Son mis héroes (...). Estuvieron allí para ayudarme en este momento en que estaba muy estresada, pero fue muy lindo, muy bonito”. Según contó, la situación la tomó totalmente por sorpresa ya que con su primer hijo habían pasado horas hasta el nacimiento.