La ceremonia de lo premios Martín Fierro, corrió la gala de eliminación de su habitual domingo, y la llevó al lunes. De esa manera, la temida instancia de expulsión se celebró un día más tarde, y todos los participantes de MasterChef debieron mostrar sus habilidades, con el fin de garantizar su permanencia en el ciclo. Poco después de las 23, Wanda Nara recibió a todos los cocineros, y explicó que el primer paso de la noche era definir quién se salvaba de la eliminación. Dos eran los chefs que se enfrentaban en esa etapa: Estefanía Herlein y Antonio López.

Para explicar la primera consigna de la velada, Damián Betular tomó la palabra y expresó: “Van a tener doce minutos para preparar un clásico de nuestros bodegones, el revuelto Gramajo”. A continuación, Germán Martitegui agregó: “En esos canastos tienen todos los ingredientes para hacer el mejor revuelto Gramajo de sus vidas, porque de eso depende que uno suba al balcón”.

Finalizado el tiempo establecido, los tres jurados procedieron a degustar los dos platos. Luego de deliberar y considerar que ambas propuestas eran muy distintas, Betular anunció: “Probamos dos revueltos de Gramajo con dos estilos muy diferentes, pero llegamos a un acuerdo, y tenemos quién de ustedes se salva de la gala de eliminación. El cocinero, o la cocinera que sube al balcón… ¡es Estefanía!”.

Con Estefanía como ganadora de la primera prueba, comenzó formalmente la prueba de eliminación. Al momento de descubrir la nueva consigna, los participantes encontraron en sus estaciones una codorniz. En ese momento, Donato de Santis explicó: “La prueba de eliminación consiste en cocinar esa codorniz, y para hacer eso tienen sesenta minutos de cocina”. En segundo lugar, Betular expresó: “Si van a ir por codorniz deshuesada, les aconsejamos que hagan la carcasa de forma delicada”, mientras que Martitegui concluyó: “Es importante que más allá de cómo decidan prepararla, la carne tiene que estar cocida pero no seca”.

Los cocineros pusieron en práctica toda clase de ideas para hacer sus codornices, y luego de una carrera contra el reloj, llegó el momento de la degustación. Rodrigo Salcedo fue el encargado de romper el hielo, y acercarle al jurado su codorniz rellena con panceta y hongos, sobre la que Martitegui opinó: “Creo que la presentación puede mejorar, este plato con la piel dorada, sería perfecto”. En segundo lugar, Daniela Kompel propuso una codorniz rellena con zanahorias glaseadas, y Betular aseguró: “La salsa es magnífica. Creo que el crocante está muy picante”.

Silvana Díaz hizo una codorniz al horno con salsa de yogurth, y Martitegui evaluó: “Cuando rellenás un ave, va a ser difícil que la cortemos y lleguemos ahí, y en este caso el relleno tiene que transmitir con el calor algún sabor a la carne, y no sé si los hongos cumplen esa función”. Antonio hizo una codorniz glaseada en el horno, con un relleno papa, con manzana y cebolla caramelizada, y acompañada de un puré de papa, y los jurados criticaron el abuso de papa en el plato.

Codorniz rellena con salsa de uvas fue la propuesta de Rodolfo Vera Calderón, y ese fue un plato sobre el que Betular subrayó: “El relleno me parece acertado, la codorniz está rica y cocida, pero tengo un tema con la guarnición, hay un exceso.”

Aquiles González Sviatschi hizo una codorniz rellena con queso, pan rallado y frutos rojos con pistacho, que le resultó muy atractiva a los especialistas, aunque con algunas reservas. Y al momento de evaluar, Donato opinó: “Es una pena que hayas arriesgado un plato así en un día de eliminación, estoy sorprendido para bien, se siente mucho el sabor de la codorniz, el pistacho le queda bárbaro, y el fruto rojo también, pero la combinación ya no me sorprende de vos”.

Luego de deliberar, Daniela y Rodrigo fueron los primeros en ser llamados, y los chefs los destacaron como los mejores de la noche. Aquiles y Rodolfo aunque lejos de la excelencia, también pasaron de etapa. De ese modo, Silvana y Antonio quedaron en la cuerda floja, y fue Silvana la nueva eliminada.