Un viaje lúdico a la mente genial de Leonardo da Vinci reaviva su proceso creativo
Da Vinci no era el apellido de su padre, odiaba a Miguel Ángel, escribía de forma invertida y se inspiró en quien le había encargado La última cena para representar a Judas: esos son algunos d...
Da Vinci no era el apellido de su padre, odiaba a Miguel Ángel, escribía de forma invertida y se inspiró en quien le había encargado La última cena para representar a Judas: esos son algunos de los datos que revela el nuevo sitio web que Google Arts & Culture dedica desde hoy a Leonardo, el gran polímata del Renacimiento. Un proyecto que demandó dos años de trabajo y la colaboración de 28 instituciones de todo el mundo, ya que se abordan las múltiples facetas de un hombre que “transformó los horizontes de la humanidad a través de su arte, ciencia e ingenio”.
Maestro en diversas disciplinas, fue inventor, ingeniero, músico, físico, biólogo, artista, matemático, arquitecto, escritor y aeronauta. “Esta es la mayor retrospectiva de su legado realizada hasta el momento”, anunció en conferencia de prensa virtual a periodistas de distintos países Amit Sood, creador de esta plataforma gratuita que busca expandir el acceso a la cultura.
“Dentro de una mente genial” se titula esta invitación a emprender una experiencia lúdica, que resulte inspiradora y no intimidante. “Queremos traerlo a la conversación contemporánea, responder a la pregunta de por qué es relevante hoy. Para los estudiantes e investigadores, es una forma fantástica de obtener información”, agregó Sood al referirse a la posibilidad de acceder de forma innovadora a los códices. Es decir, a seis de sus cuadernos llenos de bocetos, ideas y observaciones reunidos en una herramienta interactiva curada por Martin Kemp, profesor emérito de Oxford y experto en Da Vinci.
Y no sólo para quienes buscan ir tan profundo. El sitio artsandculture.google.com/project/leonardo propone también entretenerse al ver sus inventos recreados en 3D, contestar preguntas sobre su vida, jugar con un crucigrama, recombinar sus bocetos con ayuda de la inteligencia artificial e incluso colgar en el propio hogar una versión virtual de la Mona Lisa, la obra de arte más famosa de la humanidad.
También se pueden encontrar datos curiosos, como el hecho de que fue un hijo ilegítimo de Piero Fruosino y una campesina llamada Caterina. “Su nombre completo era Lionardo di ser Piero da Vinci, lo que significa ‘hijo de Piero de Vinci’, la aldea toscana donde vivían”, se explica en un apartado titulado “Siete cosas que tal vez no sepas sobre Leonardo”. Si bien es conocida su rivalidad con Miguel Ángel Buonarroti, con quien se vio obligado a convivir en el Vaticano cuando trabajaron bajo las órdenes del Papa, no lo es tanto su opinión sobre las musculosas esculturas de su colega, que habría comparado con “bolsas de nueces o racimos de rábanos”. “Cuando integró el comité que debía decidir dónde ubicar el David –dice el texto-, criticó la calidad del mármol”.
“A Leonardo le gustaba inspirarse en personas reales para crear sus personajes, y pasó gran cantidad de tiempo deambulando por las calles en busca de un criminal que sirviera de modelo para Judas. Cuando su mecenas se quejó de que estaba perdiendo el tiempo, decidió que se basaría en él”, continúa esta sección, que alude sin nombrarlo al duque Ludovico Sforza de Milán. Para él trabajó en Milán, como ingeniero militar y geógrafo.
Mientras creaba en las cortes de los nobles, Leonardo concibió inventos que anticiparon los modernos equipos de buceo, helicópteros, calculadoras y aladeltas. La mayoría no pudo construirse debido a los límites que imponía la tecnología disponible en esa época, pero ahora muchos pueden verse en movimiento gracias a su recreación inmersiva en 3D.
Los textos que reunían sus innovadoras creaciones estaban escritos en una forma invertida que se conoce como “espejo”. “¿Lo hacía porque era zurdo y quería evitar que se corriera la pintura, o para evitar que miradas curiosas le robaran las ideas?”, es la pregunta que queda abierta en este punto. Y se recuerda además que para Da Vinci “no había división entre el arte y la ciencia: incluso disecaba cuerpos para entender mejor la anatomía para sus pinturas”.
Otra novedad de la plataforma es la muestra virtual que reúne por primera vez sus obras maestras dispersas por el mundo. Entre ellas La dama del armiño, que integra el acervo del Museo Czartoryski de Cracovia; el Retrato de un músico, de la Veneranda Biblioteca Ambrosiana; la Virgen de las rocas que se conserva en la National Gallery de Londres y la única pintura de Leonardo exhibida en América del Norte: el Retrato de Ginevra de’ Benci, que pertenece a la Galería Nacional de Arte de Washington y se adelanta a la composición y el estilo de la Mona Lisa.
Falta sin embargo Salvator Mundi, el famoso retrato de Jesús atribuido a Da Vinci que se convirtió en la obra de arte más cara de la historia al rematarse en 2017 por 450 millones. En 2021, tras dos años de investigación, un documental difundido en la televisión francesa reveló que Leonardo solo había contribuido a realizar la pintura, cuyo destino actual es incierto: hay quienes dicen que se encuentra a bordo del “Serene”, el barco de Mohamed Ben Salmane, príncipe heredero de Arabia Saudita; otros, que está guardado en la caja fuerte de un banco.
Más allá del debate sobre su autenticidad, se trata de una obra que se encuentra en manos privadas. Para impulsar este tipo de proyectos, Google Arts & Culture genera alianzas con instituciones que aportan sus propios acervos; en este caso participan por ejemplo el Museo Metropolitano de Nueva York, el Getty de Los Ángeles, la Royal Academy of Arts de Londres, el British Museum y la Uffizi Gallery.
Se trata así de una buena forma de viajar gratis por el mundo, incluso desde el celular, para conocer el legado de este gran maestro de la cultura universal. Murió a los 67 años en 1519, mientras diseñaba una ciudad fortificada para el rey Francisco I de Francia, y fue enterrado en el Château d’Amboise. Según la leyenda, afirma este sitio, ese día “el rey abrazó al viejo y lloró”.